Sujétala por debajo con firmeza. Si la batería cuenta con asa, tómala de la misma. Evita golpearla y sujetarla de los postes.
Colócala en tu auto y cerciórate que quede bien asentada sobre una superficie plana. En caso de contar con un sujetador, instálalo para brindar mayor firmeza a la batería.
Limpia las terminales de tu motor antes de sujetarlas a los postes de la batería.
Se limpian con bicarbonato de sodio, agua y un cepillo especial para limpieza de postes y terminales y/o en su defecto con una pequeña lija.
Conecta primero la terminal positiva (roja) y después la negativa (negra). En caso de que no ajusten, no las golpees, utiliza una llave española y pinzas.
Enciende tu automóvil, tu batería está perfectamente instalada.
Si la batería viene caliente o se siente burbujeo, deberás esperar unos momentos para que se enfríe antes de empezar a desinstalarla.
Desconectar la terminal negativa o tierra y posteriormente la terminal positiva del acumulador.
En caso de que estén sulfatadas no las golpees, límpialas con bicarbonato de sodio; utiliza una llave española y pinzas para aflojarlas.
Después de aflojar las terminales, quitar el sujetador y retirar la batería con cuidado.
.Para diagnosticar profesionalmente debes contar con las herramientas adecuadas, como: probadores de descarga controlada, voltímetros, multímetros e hidrómetros, además de un equipo de seguridad completo.
LTH ® recomienda llevar tu batería LTH a un Centro de Servicio para que un profesional realice esta operación.
A continuación te presentamos unos diagramas que reflejan dos situaciones en las cuales puedes diagnosticar fácilmente si el problema es o no ocasionado por tu acumulador:
Primero debes realizar una inspección visual que incluya la verificación de los siguientes puntos:
1. Fecha de fabricación impresa en la etiqueta.
2. Verifica que la caja no esté rota, golpeada o abombada.
3. Comprueba que no haya fugas a través de la caja, tapa y terminales.
4. Confirma que los postes no estén golpeados o rotos.
5. Observa si hay indicios de sobrecarga en las etiquetas.
6. Revisa el nivel del electrolito.
A fin de evitar una falla prematura en los acumuladores que requieren de mantenimiento, se recomienda realizar tres mantenimientos al año, independientemente si ha habido o no problemas de arranque. Para llevar a cabo el mantenimiento, te recomendamos los siguientes pasos:
1. Verifica el nivel del electrolito de cada celda.
2. En caso de que esté bajo, agrega agua desmineralizada hasta cubrir las placas.
3. Limpia la sulfatación de las terminales del acumulador y del vehículo.
4. Asegúrate que el acumulador esté bien sujeto a la base para evitar la vibración.
5. Verifica que el voltaje de la batería (automóvil) sea igual o mayor a 13.5 volts y menor a 14.8 volts.
En caso de algún problema te recomendamos acudir a un Centro de Servicio especializado o a tu taller de confianza.
Esta creencia es totalmente incorrecta, ya que al añadir agua con minerales al interior de la batería, estamos ocasionando que estos acaben rápidamente con los componentes de la misma. Lo correcto es añadir agua libre de minerales o desmineralizada, que puede ser agua purificada.
Todas las baterías necesitan una inspección visual y una limpieza, por lo menos, una vez cada cuatro meses. La batería libre de mantenimiento gasifica menos que una normal, por lo que el consumo de agua, la sulfatación en sus postes y por lo tanto su mantenimiento, es menor.
Todas las baterías necesitan una inspección visual y una limpieza, por lo menos, una vez cada cuatro meses. La batería libre de mantenimiento gasifica menos que una normal, por lo que el consumo de agua, la sulfatación en sus postes y por lo tanto su mantenimiento, es menor.
Siempre que tenemos una batería que nos comienza a fallar, creemos que con una carga rápida podemos extender la vida de la batería. Esto es incorrecto, ya que lo único que lograremos es quedarnos varados en la próxima avenida. Esto sólo servirá cuando la batería esté descargada, pero en buenas condiciones. Ejemplo: dejaste las luces encendidas.
Agitar la batería puede provocar que el material activo se desprenda prematuramente de las placas, acortando considerablemente la vida de las baterías. Esta práctica es incorrecta, ya que nunca logrará una recarga en el acumulador.
Esto es incorrecto, lo único que tienen las placas gruesas es material muerto que no reacciona con el ácido. Cuando una placa no es de buena calidad, hay que hacerla gruesa para lograr que no se desmorone. Esto provoca que una batería sea pesada y poco eficiente.
Esta creencia es incorrecta, ya que la capacidad real de la batería nos la da la capacidad de arranque en frío y la capacidad de reserva. No importa cuántas placas lleve una batería, sino el número de amperes que nos puede dar para encender un motor. Dentro de los requerimientos de los fabricantes de automóviles en el mundo, uno de los más importantes es precisamente la capacidad de arranque en frío y la capacidad de reserva; no piensan en el número de placas sino en los amperes.
Cuando tenemos un problema en el arranque de nuestro automóvil, queremos solucionarlo golpeando los postes de la batería con una piedra o lo que nos encontremos a nuestro alrededor. Esta es una práctica totalmente incorrecta, ya que lo que estamos ocasionando es que el poste de la batería se desprenda en su interior, ocasionando una discontinuidad en el circuito. Lo recomendable en estos casos, es apretar la terminal con la herramienta adecuada sin maltratar el poste